"El uso de la sombrilla como accesorio de la indumentaria femenina ha tenido una larga trayectoria y es necesario remontarse a la antig\u00FCedad para descubrir su origen. Fue perdiendo importancia como accesorio de la indumentaria como consecuencia de la incorporaci\u00F3n femenina al trabajo. \nDurante el siglo XIX fabricantes e inventores, contribuyeron a mejorar sus t\u00E9cnicas de fabricaci\u00F3n y a hacer de la sombrilla un objeto de f\u00E1cil manejo y coste razonable. Se crean tejidos exclusivos para \u00E9stas: algod\u00F3n (modelos econ\u00F3micos), alpaca (1848) y una tela de semiseda llamada gloria (1870). Se pusieron de moda los motivos florales y rayados, aunque no desaparecieron las sombrillas con encaje de chantilly negro y sedas bordadas o pintadas. Las empu\u00F1aduras se realizaron en marfil, concha, coral, n\u00E1car y con incrustaciones de oro, plata o perlas finas. \nLa sombrilla, es un complemento indispensable del atuendo femenino refinado durante los meses de buen tiempo, tiene una finalidad pr\u00E1ctica: proteger el cutis, que la moda obliga a mantener inmaculadamente blanco del sol, del viento o del polvo. Pero tambi\u00E9n es un elemento para demostrar prestancia y garbo, y, al igual que el abanico, constituye, en consecuencia con las formalizadas pautas del momento, un auxiliar de primer orden para el complejo ritual del coqueteo. A partir de 1900, la sombrilla dej\u00F3 de utilizarse, al apreciarse menos que en otros tiempos los cutis p\u00E1lidos."@es . . . .