Barroco Época Luis XV Edad ModernaPor sus características técnicas y decorativas se puede incluir en el grupo de tejidos naturalistas. Los tejidos con este tipo datan del segundo cuarto del siglo XVIII y eran utilizados generalmente para la indumentaria. Son una muestra del gusto naturalista que, irradiando desde Francia, marcó las producciones textiles europeas desde 1730 a 1750. Se caracterizan por estar decorados con motivos florales y vegetales en los que se ha tratado de plasmar la variedad cromática, la armonía y las diferentes texturas de la naturaleza, en un intento de representar los motivos florales y vegetales del modo más realista posible, aunque en numerosas ocasiones se trate de formas inventadas, mezcla de varias especies, utilizando una gran riqueza de colorido y un "rapport" de grandes dimensiones. Las sedas tejidas, en competición con los bordados, se convirtieron en un muestrario inagotable de composiciones, donde las flores se disponen libremente sobre la superficie, o bien lo hacían recogidas en bouquets o entrelazados con cintas. Además, en las decoraciones de este tipo de tejidos también se solían incluir motivos frutales, animales o representaciones de carácter arquitectónico. Las características que definen a los tejidos naturalistas no se ciñen sólo al repertorio decorativo, sino que también se definen por el uso de procesos técnicos para conseguir la esfumatura cromática -que hasta entonces sólo se podía conseguir en los bordados- y el efecto tridimensional de los motivos a través del uso de las gradaciones del mismo color por trama ("point rentré"). Una de las características que los definen es la escala utilizada para representar los motivos de la naturaleza, que en la decoración de las sedas frecuentemente no son realistas. La mera presencia de flores en los diseños no es suficiente para identificar estilísticamente como tejidos "naturalistas", y la distinción decisiva entre los tejidos naturalistas de las década de 1730 y 1740 y otros tipos de modelos consiste más bien no tanto en la elección de los motivos como en el estilo en que se han representado. La mayoría fueron realizadas en Francia, principalmente en los talleres de Lyon, aunque el resto de manufacturas europeas trataron de imitarlas, por lo que resulta muy difícil identificar los lugares de producción, salvo que se hayan conservado las "puestas en carta". En el caso concreto de este tejido, el modo envolvente en que la decoración vegetal y floral enmarca el jarrón -en otras ocasiones se trata de motivos arquitectónicos- representado sobre fondo blanco permite datarlo como una producción francesa fechable entre 1735 y 1740 [JOLLY, A., Seidengewebe des 18.Jarhunderts II Naturalism. Abegg-Stiftung Riggisberg, Suiza, 2002, p. 31].Parte delantera de casulla formada por doce fragmentos. Sobre un fondo blanco se dispone una decoración formada por motivos florales, vistas de jardines y jarrones, realizados en seda de distintos colores. Todo el perímetro de la casulla y algunas partes están decoradas con galón dorado. La altura del "rapport" es de 39 cm., aunque las dimensiones de los fragmentos que componen la pieza impiden conocer el ancho, así como el ancho de telar. No se aprecian orillos. Está muy sucia y decolorada y presenta numerosas roturas. Del tejido con el que está realizada la casulla se conservan dos fragmentos en el museo, uno de ellos con orillo, que han conservado su colorido en muy buen estado (CE24104).
Ligamentos:
-Gros de Tours [base]
-Tramas espolinadas en seda de distintos colores para los motivos decorativos [decoración]
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CE05441
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Barroco Época Luis XV Edad ModernaParte delantera de casulla formada por doce fragmentos. Sobre un fondo blanco se dispone una decoración formada por motivos florales, vistas de jardines y jarrones, realizados en seda de distintos colores. Todo el perímetro de la casulla y algunas partes están decoradas con galón dorado. La altura del "rapport" es de 39 cm., aunque las dimensiones de los fragmentos que componen la pieza impiden conocer el ancho, así como el ancho de telar. No se aprecian orillos. Está muy sucia y decolorada y presenta numerosas roturas. Del tejido con el que está realizada la casulla se conservan dos fragmentos en el museo, uno de ellos con orillo, que han conservado su colorido en muy buen estado (CE24104).
Ligamentos:
-Gros de Tours [base]
-Tramas espolinadas en seda de distintos colores para los motivos decorativos [decoración]Por sus características técnicas y decorativas se puede incluir en el grupo de tejidos naturalistas. Los tejidos con este tipo datan del segundo cuarto del siglo XVIII y eran utilizados generalmente para la indumentaria. Son una muestra del gusto naturalista que, irradiando desde Francia, marcó las producciones textiles europeas desde 1730 a 1750. Se caracterizan por estar decorados con motivos florales y vegetales en los que se ha tratado de plasmar la variedad cromática, la armonía y las diferentes texturas de la naturaleza, en un intento de representar los motivos florales y vegetales del modo más realista posible, aunque en numerosas ocasiones se trate de formas inventadas, mezcla de varias especies, utilizando una gran riqueza de colorido y un "rapport" de grandes dimensiones. Las sedas tejidas, en competición con los bordados, se convirtieron en un muestrario inagotable de composiciones, donde las flores se disponen libremente sobre la superficie, o bien lo hacían recogidas en bouquets o entrelazados con cintas. Además, en las decoraciones de este tipo de tejidos también se solían incluir motivos frutales, animales o representaciones de carácter arquitectónico. Las características que definen a los tejidos naturalistas no se ciñen sólo al repertorio decorativo, sino que también se definen por el uso de procesos técnicos para conseguir la esfumatura cromática -que hasta entonces sólo se podía conseguir en los bordados- y el efecto tridimensional de los motivos a través del uso de las gradaciones del mismo color por trama ("point rentré"). Una de las características que los definen es la escala utilizada para representar los motivos de la naturaleza, que en la decoración de las sedas frecuentemente no son realistas. La mera presencia de flores en los diseños no es suficiente para identificar estilísticamente como tejidos "naturalistas", y la distinción decisiva entre los tejidos naturalistas de las década de 1730 y 1740 y otros tipos de modelos consiste más bien no tanto en la elección de los motivos como en el estilo en que se han representado. La mayoría fueron realizadas en Francia, principalmente en los talleres de Lyon, aunque el resto de manufacturas europeas trataron de imitarlas, por lo que resulta muy difícil identificar los lugares de producción, salvo que se hayan conservado las "puestas en carta". En el caso concreto de este tejido, el modo envolvente en que la decoración vegetal y floral enmarca el jarrón -en otras ocasiones se trata de motivos arquitectónicos- representado sobre fondo blanco permite datarlo como una producción francesa fechable entre 1735 y 1740 [JOLLY, A., Seidengewebe des 18.Jarhunderts II Naturalism. Abegg-Stiftung Riggisberg, Suiza, 2002, p. 31].