Esta representación de la Anunciación constituye la segunda de las seis escenas que decoran este teatrino en el que se han representado distintos episodios de la vida de la Virgen alojados en pequeñas hornacinas. En un interior decorado con distintos espejos y en cuyo fondo hay un balcón con balaustrada que permite ver el paisaje, aparecen las figuras de cera de la Virgen y el ángel, vestidos con indumentaria hecha de seda y papel, y la paloma del Espíritu Santo. La Virgen está arrodillada ante un pequeño reclinatorio en el que se ha colocado un libro abierto y un jarrón con flores, y a cuyos pies aparece un gato.