La pieza tiene forma irregular y está formada por dos fragmentos de tejido, unidos entre sí con la decoración contrapuesta. Sobre fondo azul, las formas de encaje y vegetales están realizadas en blanco -seda en su color- y se disponen sobre un fondo adamascado también decorado con motivos vegetales. La decoración se completa con distintas formas florales realizadas en color amarillo, rosa claro y salmón. Las dimensiones de la pieza impiden apreciar el "rapport" de la decoración o las dimensiones del ancho de telar. Conserva uno de los orillos (tiene 2 mm. de anchura, en color blanco y azul).
Ligamentos :
-Raso de tres por urdimbre en color azul [base]
-Tramas liseré en azul [decoración]
-Tramas liseré que ligan en sarga de color blanco [decoración]
-Tramas espolinadas en seda STA amarilla, rosa claro y salmón para flores [decoración]Por las características técnicas y decorativas se puede incluir en el grupo de tejidos "de encaje" o "a dentelle". Este tipo de tejidos se caracterizan por el uso de una decoración en la que se combinan motivos vegetales esquemáticos dispuestos de modo simétrico en torno a un eje vertical, que están contenidos en franjas que imitan motivos de encajes. Esta tipología apareció hacia 1690 recuperando los motivos vegetales enmarcados característicos de fines del siglo XVI, pero renovada a través de la inclusión de los encajes. Tuvieron un gran éxito en la década de 1690 y en la de 1720, si bien en esta época los motivos vegetales abstractos fueron progresivamente sustituidos por motivos florales, hasta que hacia 1730 las flores pasaron a ocupar la parte fundamental de la composición (tejidos naturalistas). Este tipo de tejido era emblemático del progreso técnico que había alcanzado la industria textil europea durante la segunda mitad del siglo XVIII, especialmente en Lyon, principal centro inspirador de las novedades de la época. También en Venecia era posible producir tejido complejos brocados con tramas plateadas o doradas denominados tejidos "a pizzo", capaces de competir en calidad y diseño con las producciones francesas. A nivel técnico, la mayoría de estos tejidos consisten en un lampas con tramas decorativas liseré y espolinadas de hilo metálico. A la particularidad técnica debida a la importante presencia del hilo metálico, se añade la novedad de la decoración de flores y frutos exóticos que se desarrollan en vertical de modo ondulado. La gran dificultad técnica que entrañaba su fabricación puso las bases para que se pudieran hacer los tejidos "bizarros". Se utilizaban principalmente para indumentaria masculina y femenina. Este tejido en concreto tiene muy poca densidad, y por el tipo de decoración floral y vegetal se puede datar entre 1700 y 1720.Época Luis XIV Edad Moderna Barroco
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CE24507
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La pieza tiene forma irregular y está formada por dos fragmentos de tejido, unidos entre sí con la decoración contrapuesta. Sobre fondo azul, las formas de encaje y vegetales están realizadas en blanco -seda en su color- y se disponen sobre un fondo adamascado también decorado con motivos vegetales. La decoración se completa con distintas formas florales realizadas en color amarillo, rosa claro y salmón. Las dimensiones de la pieza impiden apreciar el "rapport" de la decoración o las dimensiones del ancho de telar. Conserva uno de los orillos (tiene 2 mm. de anchura, en color blanco y azul).
Ligamentos :
-Raso de tres por urdimbre en color azul [base]
-Tramas liseré en azul [decoración]
-Tramas liseré que ligan en sarga de color blanco [decoración]
-Tramas espolinadas en seda STA amarilla, rosa claro y salmón para flores [decoración]Época Luis XIV Edad Moderna BarrocoPor las características técnicas y decorativas se puede incluir en el grupo de tejidos "de encaje" o "a dentelle". Este tipo de tejidos se caracterizan por el uso de una decoración en la que se combinan motivos vegetales esquemáticos dispuestos de modo simétrico en torno a un eje vertical, que están contenidos en franjas que imitan motivos de encajes. Esta tipología apareció hacia 1690 recuperando los motivos vegetales enmarcados característicos de fines del siglo XVI, pero renovada a través de la inclusión de los encajes. Tuvieron un gran éxito en la década de 1690 y en la de 1720, si bien en esta época los motivos vegetales abstractos fueron progresivamente sustituidos por motivos florales, hasta que hacia 1730 las flores pasaron a ocupar la parte fundamental de la composición (tejidos naturalistas). Este tipo de tejido era emblemático del progreso técnico que había alcanzado la industria textil europea durante la segunda mitad del siglo XVIII, especialmente en Lyon, principal centro inspirador de las novedades de la época. También en Venecia era posible producir tejido complejos brocados con tramas plateadas o doradas denominados tejidos "a pizzo", capaces de competir en calidad y diseño con las producciones francesas. A nivel técnico, la mayoría de estos tejidos consisten en un lampas con tramas decorativas liseré y espolinadas de hilo metálico. A la particularidad técnica debida a la importante presencia del hilo metálico, se añade la novedad de la decoración de flores y frutos exóticos que se desarrollan en vertical de modo ondulado. La gran dificultad técnica que entrañaba su fabricación puso las bases para que se pudieran hacer los tejidos "bizarros". Se utilizaban principalmente para indumentaria masculina y femenina. Este tejido en concreto tiene muy poca densidad, y por el tipo de decoración floral y vegetal se puede datar entre 1700 y 1720.